Asi que, finalmente, el 3 de junio por la tarde, fue la boda. Despues de ponernos 'guapos' en nuestro hotel (relativamente barato), cogimos el metro para ir al hotel oficial de la boda (el mas caro de Caracas), desde donde saldrian los autobuses que nos llevarian a la gran sinagoga de Caracas, para la ceremonia religiosa. Durante el corto viaje en metro, y despues caminando por la calle, fuimos la sensacion. En el camino a nuestro destino, Lope reparo en un vendedor callejero que ofrecia mango salado, algo que a nuestro colombiano le encanta. Asi que, nos dimos un respiro y disfrutamos de lo que parece ser una delicatessen en Sudamerica (vease la foto).
De la ceremonia en la sinagoga, poco que contar, sobre todo teniendo en cuenta que la mayoria de las oraciones son en hebreo. Menos mal que el rabino principal nos solto un speech (homilia?) en castellano, y luego otro rabino invitado, lo propio en ingles, para que no estuvieramos completamente perdidos. Menos mal que nos dieron un folletillo en el que se explicaban cada una de las partes de la ceremonia y su significado. Datos curiosos: en la sinagoga, hombres y mujeres estan separados, hombres a la derecha y mujeres a la izquierda; todos, incluidos los gentiles, teniamos que llevar la 'kippa' o kipa (con acento en la a) en castellano, que como define la RAE es el 'casquete redondo, semejante al solideo, usado por los judÃos practicantes, especialmente en los actos religiosos'. Para la ocasion, nos dieron una kipa conmemorativa, con el nombre de los novios, Darel y Daniel, y la fecha de la boda grabados en la cara concava.
Despues de la ceremonia religiosa, nos fuimos la salon de fiestas mas pijo de Caracas, para la recepcion, como dicen en los USA, o el cenorrio+baile, como se dice en Espanna. Alli, en lugar de sentarnos, cenar y despues bailar, se empezo con un cocktail de pie y en cuanto llegaron los novios comenzo el baile. La cena fue de bufet y a la vez que el baile. En el baile, despues de un breve vals, pasaron a canciones tradicionales judias y a los bailes correspondientes: hombres y mujeres separados, bailando alrededor del novio y la novia, respectivamente, en circulos concentricos. Divertido, aunque despues de media hora de lo mismo ya empezo a cansar.
Finalmente, la musica judia dio paso a la musica de verdad, lo que todos estabamos esperando, Eurotrash de los 80 y 90, salsa y merengue, y algun tema un poco mas moderno. No, no se bailo 'Paquito el chocolatero'. Para amenizar el sarao, repartieron mascaras, sombreritos y tal, en plan cotillon de Nochevieja pero un poco mas elaborado. Aqui teneis un boton de muestra (prometo que ninguno de los dos estabamos, todavia, bajo los efectos del alcohol):
Aqui os dejo, por ultimo, una fotillo de los novios. Que conste que esta es la manera como acabaron alli y que ella no llevo la mascara y las plumas durante la boda propiamente dicha. Por si acaso quedaba alguna duda.
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