Trabajar hoy, víspera de Thanksgiving, es como estar en la oficina el día 24 de diciembre por la tarde. Casi todo el mundo ya se ha ido y los que quedan posiblemente estén mareando la perdiz, como yo mismo en estos momentos. Me disponía a escribir algo para el blog, a ver si así me volvían las fuerzas para seguir trabajando en el artículo que tengo entre manos, sobre Parkinson y ácido úrico, cuando Alexandros ha aparecido en el despacho con una cara de decir ‘menudo coñazo es esto, yo me quiero ir a casa ya’. Nos hemos leído la mente y hemos decidido que, en vez de perder el tiempo en la escuela, nos vamos a ir al cine a malgastar nuestras horas y nuestro dinero (esto es, la última peli de James Bond). Como unos campeones. Pero es lo que nos pide la cabecita ahora.
No penséis que he terminado con mi historia de Chicago. Todavía me queda contaros nuestro idílico paseo por el Lincoln Zoo Park y la vuelta a Boston. Por lo demás, ya casi he terminado con mi presentación para el jueves de la semana que viene en Minneapolis. Ahora sólo me queda practicar. A cuidarse, pues. Ah… happy thanksgiving!
¿Sabéis quién es el protagonista?
ReplyDeleteDaniel CRAIG!!!
Es una señal, seguro...
Ja ja ja ja ja ja ja!!!! ja ja ja ja ja ja ja ja!!!!
ReplyDelete¡¡¡Un fantasma!!!
ReplyDeleteIs the same Cohen?
ReplyDeletehttp://www.nytimes.com/2006/09/28/movies/28bora.html?ex=1317096000&en=ab828b4ca9230dd3&ei=5088&partner=rssnyt&emc=rss
Casino Royale con queso
ReplyDelete