Asi que despues de visitar El Hatillo y comer un excelente pollo asado (probablemente la unica vez que comimos algo de carne bien preparada en todo el viaje), nos volvimos a Caracas. Curiosamente, a la vuelta el precio del autobus (Bs. 1100) era diferente que a la ida (Bs. 1000). Misterior de la economia venezolana. Esa tarde nuestro plan era intentar visitar el Museo de Arte Contemporaneo.
Cogimos el metro a la estacion correspondiente, Bellas Artes, y cuando salimos a la calle nos encontramos en medio de una manifestacion pro-Chavez. Como sabeis, esos dias en Venezuela hubo bastantes manifestaciones anti y pro-Chavez tras la decision del Gobierno "bolivariano" de Venezuela de no renovar la licencia a un canal de TV critico con Chavez. Los universitarios se movilizaron, pero el Gobierno saco a los suyos a la calle. Todo un despliegue de medios: autobuses trayendo gente de los alrededores de Caracas, camisetas gratuitas, salsa y reggeaton a todo volumen, y todo el mundo muy concienciado. Fue una experiencia interesante, sobre todo pensando que el dinero que el Gobierno se estaba gastando en organizarse su manifestacion a favor podria ser empleado en otros asuntos mas importantes. Aqui dejo algunas fotos.
Puto Chávez.
ReplyDelete"Curiosamente, a la vuelta el precio del autobus (Bs. 1100) era diferente que a la ida (Bs. 1000). Misterior de la economia venezolana."
ReplyDeletees lo típico de repúblicas bananeras en la que la masa monetaria crece a un ritmo del 140% anual... inflación galopante.
"sobre todo pensando que el dinero que el Gobierno se estaba gastando en organizarse su manifestacion a favor podria ser empleado en otros asuntos mas importantes."
el petróleo da para mucho... además de eso, mantiene al régimen castrista, a Evo Morales y aún así Chavez se permite el lujo de destruir la economía productiva del país generando pobres que se convierten en dependientes de las políticas asistenciales y pasan a convertirse en estómagos cautivos y agradecidos.
Lo que no cuento es que durante la 'manifestacion', Chavez estaba dando uno de sus discursos, retransmitido a todo volumen por los altavoces pagados por el gobierno. El contenido de su discurso era, por lo menos, nulo. Cualquier persona con dos dedos de frente se daria cuenta de que, ademas de dormir a cualquiera con su verborrea insustancial, los razonamientos y argumentos no aguantarian cinco minutos de discusion entre persionas racionales.
ReplyDeletecómo te lo pasaste compañero! viva la revolusión!
ReplyDeleteComandante Cohen